El Valencia 1 - Barça 1 de ayer fue un partido no apto para cardíacos. El resultado acabó en tablas, pero el partido estuvo lleno de matices. El primero es destacar que el Valencia salió a por todas desde el minuto 1 y estuvo mucho más presente en el área del Barcelona que viceversa, pero los culés llevaban serio peligro cada vez que se acercaban a la meta de Diego Alves. Así, el Valencia disparó 14 veces a puerta (7 entre los 3 palos) por 3 del Barcelona (sólo 1 entre los 3 palos). El gol del Barça vino tras el único tiro a puerta de los culés entre los 3 palos. Diego Alves rechazó el disparo de Çesc, el balón lo recogió Maduro que se tropezó con el portero tumbado en el suelo cuando iba a despejar, y cuando el balón iba a entrar en portería, Maduro llegó y despejó finalmente con la fortuna para Messi que pasaba por allí y le rebotó en la cabeza para marcar el primer gol del partido. Antes de el gol Messi pudo adelantar a los culés cuando se plantó sólo delante del portero, le regateó y justo antes de disparar apareció Rami de la nada para hacer una entrada que le quitaba limpiamente el balón. Poco después del gol, otra jugada en la que Çesc se sacó un disparo desde la frontal que dio en el palo. Los 20 primeros minutos fueron del Barça, pero el Valencia sacó la casta y se hizo con el control del resto del partido. Hasta en 3 ocasiones tuvo que sacar el balón de la línea de gol la defensa blaugrana, sin contar los disparros marrados a bocajarro tanto por Soldado, Piatti o Tino Costa. La defensa culé no sabía como parar a los chés y realizaron 8 faltas por 3 del Valencia en todo el partido. Tras dominar todo el encuentro, una falta a 16 metros realizada sobre Aduriz, Parejo aprovechó para poner las tablas en el marcador con un disparo por la escuadra derecha de Valdés. Este empate deja vivo al Valencia para seguir en la lucha por el campeonato a 3 puntos del Barcelona.
En el otro partido disputado ayer, el Betis se hizo el duelo por la cuarta plaza tras vencer al Zaragoza por 2-0. Rubén Castro fue el encargado de realizar los 2 goles, pero el verdadero peligro lo llevó Molina, que tuvo varias ocasiones para sentenciar el partido. Tras la victoria, ya son 6 las jornadas en las que el Betis permanece invicto.
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